Diabetes gestacional

Se la define como la alteración en el metabolismo de la glucosa que se inicia o es reconocido por primera vez durante el embarazo. Esta definición no excluye la posibilidad de que sea una intolerancia a la glucosa -prediabetes-, una diabetes previa no reconocida o que comenzó conjuntamente con el embarazo. Es una condición exclusiva de la gestación.
Diagnóstico y factores de riesgo Se realiza en la semana 24 de gestación a través de una prueba de tolerancia oral a la glucosa (PTOG) , antes llamada curva de glucemia. Cuando la mamá tiene Diabetes Gestacional (DG) hay que comunicarle que a los 45 días luego del parto debe realizarse otra PTOG, para reclasificarse, con el fin de determinar si desaparece o persiste. Entre los factores de riesgo se encuentran: la obesidad materna, los antecedentes en embarazos previos de DG, recién nacidos -de término- con peso de 4000 gr. y óbito fetal, también los antecedentes hereditarios como diabetes en familiares de primer grado. En la mayoría de los casos la DG comienza a desarrollarse en el tercer trimestre; si bien puede presentar complicaciones cabe destacar que no es una causa de malformaciones congénitas. La importancia de hacer conocer este tema es por la necesidad de obtener un diagnóstico precoz para poder tratar a la madre, ya que hay mayor probabilidad de morbilidad tanto en ella como en el feto y el recién nacido. Por supuesto que el aumento de la morbimortalidad se da en pacientes que no se diagnostican o no son tratadas.
Por esta razón es necesario realizar la pesquisa a las embarazadas para detectar con tiempo esta asociación; de esta manera, el pronóstico del binomio madre-hijo será más favorable. La DG puede aparecer también en las embarazas que no presentan ningún factor de riesgo debido a que en el transcurso de la gestación se producen varias modificaciones metabólicas y existe una tendencia a elevar la glucemia o azúcar en sangre. En el caso de las embarazadas que ya eran pacientes diabéticas antes de la concepción, se habla de madres con Diabetes Pregestacional. La gran mayoría de estas mujeres presentan diabetes tipo 1 aunque en los últimos años se ha incrementado el número de diabéticas tipo 2 que se embarazan. En este grupo, la alteración de la tolerancia a la glucosa puede producir complicaciones durante toda la vida intrauterina; es por eso que a toda mujer en edad genital activa con diabetes tipo 1 y 2 hay que hacerle hincapié en la planificación del embarazo. La hiperglucemia crónica -el aumento del azúcar en la sangre en forma mantenida- afecta a todo el organismo y más aún cuando la paciente diabética se embaraza; es por eso que puede cursar con malformaciones. El descontrol metabólico mantenido facilita el envejecimiento prematuro de la placenta y esto suscita que el crecimiento y desarrollo del feto sea deficiente provocando parto prematuro y bajo peso al nacer o una situación mayor como es la muerte del feto. Por este motivo la palabra planificación debe ser tenida en cuenta por estas futuras madres. Será fundamental analizar con la paciente cuándo será el mejor momento para el embarazo y cómo prepararse considerando su actividad física y laboral. El buen control metabólico antes, durante y al momento del parto es crucial. Gracias a ese control el embarazo transcurrirá de manera similar al de una mamá sin diabetes.
bioeste | Consultorios Médicos | biomujer
www.laboratoriobioeste.com